ISAÍAS 8, 23b-9, 3
En otro tiempo, humilló el Señor la tierra de Zabulón y la
tierra de Neftalí, pero luego ha llenado de gloria el camino del mar, el otro
lado del Jordán, Galilea de los gentiles. El pueblo que caminaba en tinieblas
vio una luz grande; habitaba en tierra y de sombras de muerte, y una luz les
brilló.
Acreciste la alegría, aumentaste el gozo; se gozan en tu
presencia, como gozan al segar, como se alegran al repartirse el botín. Porque
la vara del opresor, y el yugo de su carga, el bastón de su hombro, los
quebrantaste como el día de Madián.
COMENTARIO
Estamos ante un texto
introductorio a un hermoso poema de paz. El profeta cree ver la llegada de un
tiempo de luz para Galilea, tras un largo periodo dependiendo de Asiria. Esta
profecía tiene su cumplimiento un siglo después, en tiempos del rey Josías (s.
VII), quien libera al pueblo de la opresión de los gentiles.
Los primeros cristianos de la
comunidad de san Mateo han visto en esta profecía de Isaías la llegada de los
tiempos mesiánicos. Con el Mesías esperado, Jesús, llega la luz que brilla en
las tinieblas; son los tiempos de la alegría como en los momentos de la recolección
de los frutos del campo, cuando el año se ha mostrado favorable.
Ahora bien, así como los profetas
no controlan del todo las imágenes proféticas que nos describen esos tiempos
por venir, tampoco Isaías llegó a conocer la situación del pueblo un siglo
después.
En los oráculos proféticos hemos
de ver el futuro que siempre nos sorprende: en este caso con la llegada del
Mesías esperado en la persona de Jesús. Pero al mismo tiempo esta profecía está
hablando de un futuro aún no llegado: la implantación de la paz y justicia
final de los tiempos. Este futuro final también encuentra su proyección en diferentes
etapas intermedias entre la llegada de Jesús y el final de esa historia de la
humanidad.
Recordemos que el creyente vive siempre de esperanzas y disfruta de los
sucesivos cumplimientos, mientras espera el cumplimiento de la esperanza
definitiva: el encuentro con el Padre.
**********
No hay comentarios:
Publicar un comentario